viernes, 14 de septiembre de 2007

14 de Setiembre del 2007

Esta semana he estado un poco extraviada, estoy en lo que podría describir como el limbo de los sentimientos. Me he sumergido en una tierra en la que no me gusta estar; qué te puedo decir? es la melancolía del pasado y un poco de miedo o mejor dicho incertidumbre a lo que venga.


Me siento feliz con lo que tengo, mis días son hermosos y eso lo sabes, me encantan los colores y me encanta también como soy: algo le cambiaría a mi personalidad pero me parece que se acomoda muy bien a las demás, esa parte de mí sin máscara y aunque la parte superficial me trae mas problemas que arreglos, porque ser bella se convierte en un arma de doble filo, es ser una especie de maniquí para muchos y hasta para mi misma. Me obliga a la perfección diaria, cosa que es imposible -ya que soy humana-, algunas veces es un poco frustrante, pero esto no es lo primordial de mi vida, aunque me importa –no lo puedo negar y menos a vos-, me gustaría que pudieran internarse en mis pensamientos, más bellos que mi caparazón.


Estoy un poco aturdida. Serán las secuelas del fin de semana o será que no me conformo? Estoy en un límite entre mi locura y mi estabilidad, pero me la paso en esos dos extremos constantemente, buscando y curioseando, como siempre.


Esta semana te he extrañado, especialmente para desahogarme, aunque si lo hago pocas veces, no porque no quiera es que me paralizo y no soy capaz de gritar auxilio. Prefiero ver a los ojos con un S.O.S en ellos y que me abracen.


Pero tampoco estoy tan mal… a veces me pasa que pienso demasiado… que me domina la fantasía y yo me dejo llevar…