lunes, 1 de septiembre de 2008

Los gelatinosos

El título es tuyo sí, pero de ambos la historia por lo visto.

Muchas veces me pregunto que hacías vos, mientras yo era chico y me divertía a mi manera. Me pregunto también, como serías durante tu escuela, mientras yo bregaba con la mía.

Como sería verte de estudiante y como sería verte de hermano, de travieso, de hijo, de inventor. Yo se como era yo. Sé como me divertía y como sufría. A lo mejor sufrimos al mismo tiempo, a lo mejor nos reímos de las mismas cosas y a la vez, pero nunca lo supimos.

Por eso me divierten tus historias, pero me divierten más cuando tus viejos se involucran porque es como escuchar a los míos contando la misma situación.

No sé si es que todos los niños son iguales, pero yo prefiero asumir que vos y yo, fuimos siempre el uno para el otro; desde chicos, no crees?

Los gelatinosos fue tu juego de viaje con tus hermanos, los míos y yo no le teníamos nombre, pero jugabamos igual y sufríamos igual. Yo desde mi perspectiva de hermano menor y vos desde la tuya de hermano mayor. Que curioso, cierto? A lo mejor vomitábamos al mismo tiempo, quien sabe.

Muchas veces tuve que verte y vos a mi, pero muchas veces nos ignoramos hasta el día en que tuvo que sembrarse la semilla que daría paso a la cosecha de veinte años después. Pensaste en ello alguna vez? Yo sí, muchas.

1 comentario:

González Luis dijo...

Me encanta la forma en que está redactado. El título de los gelatinosos me inspira ver un par de mocosos embarrados de miel de gelatina y chorreados en sus pechos y marcados en sus labios de este postre.
Cuantas historias se repiten y cuan diferentes son incluso entre hermanos de igual edad y bajo un mismo techo.
La proyectiva y el retomar la historia, me hizo encontrarme con otros gelatinosos y caramelosos personajes de mi vida.
PD. Actualiza mi web (en tus gustos)